Por Decreto Supremo 270 MOP del 12 de mayo de 2017, Michelle Bachelet autorizó que se amplíen a 4 las pistas por sentido de la autopista Vespucio Norte entre la Ruta 68 (Carretera a Valpo) y Ruta 78 (Autopista del Sol), y se modifiquen algunas intersecciones (Vespucio con Santa Elena/El Rosal; Vespucio con San Pablo), y se creen conexiones nuevas. El Decreto autorizó entregar 4 millones de dólares del fisco a la concesionaria para esos estudios.
A mayo 2018 la concesionaria informa que los estudios se encuentran en desarrollo. Sabemos que se han mostrado ya planos preliminares a la Municipalidad de Maipú. En ellos se constata que la vía no cumplirá el Manual de Carreteras del MOP, lo que significará un importante riesgo de accidente. El problema es que no existirá mediana con el estándar de seguridad definido en el Manual (la mediana separa los dos sentidos de circulación).
Las intervenciones y posibles expropiaciones sobre los barrios circundantes no se conocen. Tampoco los nuevos pórticos que podrían instalarse o cambios de tarifas asociados.
A diferencia del proyecto Vespucio Oriente (Las Condes, Vitacura, La Reina), que será bajo tierra, aquí todo será en superficie, con tréboles carreteros, sin evaluación ambiental ni compensaciones ambientales.
Por algún motivo el proyecto se ha mantenido en reserva. No aparece en el documento “PROGRAMA DE MEJORAMIENTO DE CONCESIONES VIALES” del MOP con todas los proyectos de modificaciones viales en Chile. Tampoco aparece en la sección web del MOP “Autopistas Urbanas e Interurbanas: Nuevas Obras de Ampliación de Capacidad”.
Por supuesto, con ese secretismo, el proyecto no ha respetado el protocolo de participación ciudadana temprana definido por el propio MOP.